Llevo tiempo pensando en hacer jabón, siempre me ha parecido curioso su proceso. Recuerdo de niña que iba con mis padres al campo de unos amigos y uno de esos días les llevamos aceite usado en una garrafa y la señora se puso a hacer jabón, delante de la casita, al aire libre, con un capazo de goma y un palo largo de madera. Recuerdo como daba vueltas a aquella masa con el palo, por supuesto yo podía mirarlo pero de lejos, ya que aquello quemaba y era peligroso.
Como ya no soy una niña (ya quisiera yo!) y tenía esa inquietud, he hecho mi primer jabón. He decidido utilizar aceite limpio principalmente porque no suelo hacer cocciones que requieran mucho aceite y no dispongo de aceite usado. Si tu tienes puedes utilizarlo sin problema, eso si, asegurándote que esté limpio de restos sólidos, hay que colarlo. Como quería que hiciera espuma he puesto una parte de aceite de coco y el resto os cuento ahora.

 
Ingredientes:

• 350 gr de infusión de lavanda (210 gr de agua mineral más 2 cucharadas de flores de lavanda)
• 135 gr de sosa en escamas
• 750 gr de aceite de oliva virgen
• 250 gr de aceite de coco
• 10 gr de aceite esencial de lavanda
• Material
• Guantes
• Gafas
• Báscula
• Un cazo
• Recipientes de cristal (tipo Pirex)
• Cuchara de madera
• Termómetro
• Batidora
• Molde

Elaboración:
Muy importante protegernos las manos y los ojos con guantes y gafas, la sosa hace una reacción con el agua y es muy corrosiva causando quemaduras serias a los ojos y la piel si no nos protegemos bien.
Debemos hacerlo en exterior si es posible o en un lugar ventilado para evitar inhalar el vapor que se crea al juntar la sosa con el agua.
¡Y ahora que ya estamos protegid@s vamos a empezar!

1. Poner en el recipiente la infusión de lavanda ya fría, después añadir poco a poco la sosa. Remover hasta su disolución con cuidado porque la temperatura empezará a subir. Esperaremos a que el preparado tenga una temperatura de entre 50-60º.
   Mientras tanto calentamos los aceites en un cazo a fuego lento hasta que alcance una temperatura de entre 50-60º.
2. Añadir la solución de sosa al aceite de oliva poco a poco y remover con precaución de no salpicar (Acordaros de echar siempre el líquido al aceite y no al contrario).
3. Introducid la batidora en la mezcla y empezad a batir con cuidado de no salpicarse. Añadimos el aceite de lavanda. Continuaremos batiendo hasta que la mezcla adquiera la consistencia de unas natillas ligeras ( a esto se le llama alcanzar la traza).
4. Echaremos ahora la mezcla en un molde de plástico, metal o cristal (yo utilicé uno de silicona de plum cake) y si os gusta añadirle por encima flores de lavanda desmenuzadas. Lo dejamos reposar y lo cubrimos con papel film de plástico y lo envolvemos con una toalla o un trapo de cocina para que no pierda calor. Dejamos asentar durante 24/48 horas hasta que el jabón adquiera una consistencia bien sólida. Es entonces el momento de desmoldar y cortar en pastillas de jabón al gusto.

Y muy importante : el jabón SIEMPRE debe curar durante cuatro semanas en un sitio aireado antes de usarlo. Lo siento por l@s impacientes , pero hay que esperar un poco para poderlo usar.

¿Ya habíais hecho alguna vez? Y si no es así… ¿os animáis a hacerlo?